Hay muchas situaciones que pueden surgir a la hora de adquirir una propiedad y tenerla bien asegurada. Al surgir dudas en este sentido, nuestra mejor recomendación es ponerse en contacto con expertos en la materia como Segurea.
Pero antes de llevar a cabo todos los aspectos fundamentales que debes saber en una operación inmobiliaria, hay un requisito administrativo que asegura a toda unidad dedicada a vivienda, y que garantiza que esta tiene todas las características mínimas para poder ser habitada por personas; la cédula de habitabilidad. Hoy te lo contamos todo y cómo conseguir cédula de habitabilidad.
Índice
Qué es la cédula de habitabilidad
Como hemos comentado anteriormente, la famosa cédula de habitabilidad es el certificado que nos confirma que una vivienda cuenta con los requisitos necesarios para habitarla y el ayuntamiento de cada comunidad autónoma es el encargado de analizar y evaluar la documentación presentada para dar pie a levantar la información de la vivienda.
Todo esto en un plazo máximo de 3 meses si se concede el certificado o cédula de habitabilidad. Una vez cumplido el trámite positivamente se puede empezar a negociar ya sea una compraventa, alquiler etc. Sobre todo, antes de iniciar cualquier proyecto inmobiliario se deben conocer todas las regulaciones que existen en el momento y no se puede escriturar sin cédula de habitabilidad.
Como saber si una vivienda tiene cédula de habitabilidad
Para verificar cómo está la cédula de habitabilidad, uno de los requisitos es pedirla en el Ayuntamiento donde la vivienda en cuestión esté escriturada. A pesar de que todas las Comunidades Autónomas llevan sus trámites de manera diferente, la mayoría te permiten pedirlo de manera telemática.
Requisitos para conseguir la cedula habitabilidad
Los requisitos que permiten la emisión de esta, se contemplan en los articulados de los decretos divulgados para tal fin dependiendo de cada comunidad autónoma.
Aún así, existen unas normas de construcción que pertenecen al estándar de la industria iguales para cualquier zona geográfica. ¿A que se refieren estas normas?
- Al área mínima de construcción.
- Las estancias que deben contemplarse.
- Algunas cotas en las medidas de alturas y anchos respetables en su estructura.
Por otro lado, hay 3 aspectos que se deben tomar en cuenta en la evaluación para conceder o no la cédula de habitabilidad; las dimensiones, la salubridad y la seguridad.
Estos requisitos fundamentales se verifican juntos con la información entregada al ayuntamiento por su técnico correspondiente y se deben cumplir con todas estas exigencias. Se deben tener muy en cuenta a la hora de averiguar cómo obtener la cédula de habitabilidad para nuestra futura vivienda.
Los tipos de cédula de habitabilidad
Actualmente existen 3 tipos diferentes. Estos son:
- De primera ocupación: Es la licencia que el Ayuntamiento de la localidad donde se encuentra el inmueble entrega al promotor.
- De primera ocupación con rehabilitación: Esta se centra en la cédula que acompaña a los inmuebles rehabilitados en profundidad.
- De segunda ocupación: este es utilizado para aquellos inmuebles habitados con anterioridad.
Cuándo necesitamos la cédula de habitabilidad
Según el artículo 9 del decreto 141/2012 todas las viviendas deben de tener vigentes sus cédulas de habitabilidad pero existen excepciones:
- Cuando el comprador declare que va a realizar grandes remodelaciones a la vivienda, en este caso tendrá que tramitarla al acabar.
- Cuando la vivienda vaya a ser demolida para llevar a cabo otras edificaciones.
- Cuando ya no se vaya a usar para fines residenciales.
Para los contratos de alquiler, te recomendamos estar al día con este requisito, ya que podría darse la anulación de cualquier negociación.
Tramitar la cédula de habitabilidad
Aquí se necesita la ayuda de un profesional, específicamente un arquitecto que visitará el inmueble y comprobará que la vivienda cumple con todos los requisitos.
Precio cédula de habitabilidad
Dependerá de la localidad donde la solicites pero primeramente se deberán pagar los servicios del arquitecto que hemos comentado en el punto anterior y después el coste de la tramitación burocrática es de aproximadamente 42,60 euros, dependiendo de dónde tengamos situada la vivienda.
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